“El sueño de la razón produce monstruos” es un grabado de Francisco de Goya que ha dado pié a multitud de interpretaciones sobre sus significados. El más acertado es el que apunta que quiere trasladar la idea de que “cuando los hombres no oyen (escuchan sería más acertado afirmar) el grito de la razón todo se vuelve visiones”.

Parece dibujado y definido para aplicarlo a la actual situación que atraviesa Catalunya y a la posición adoptada por ciertos políticos y colectivos que con su actitud poco reflexiva y errática, más parece que estén en el proceso de visiones que de escuchar a la razón.

Quizás los casos más representativos sean un Puigdemont que desde su atalaya de Waterloo (ha elegido un lugar acertado por su significado) más bien parece un Napoleón de tres al cuarto, que un President del siglo XXI. Lo normal por tanto es que en ese lugar acabe su periplo como “Le petit caporal”.

También su sucesor puesto a dedo al más puro estilo de la Roma imperial, Quim Torra, aunque este con menos bagaje político le hace dar continuamente bandazos. Lo ocurrido después del aniversario del 1-O indica hasta donde ambos han perdido la razón. El ultimátum, rectificado y posteriormente adaptado, que éste dio al presidente del gobierno Pedro Sánchez podría figurar en los anales del desvarío político.

Pero el problema más preocupante no es que existan dos President, el real y el ficticio, que están metidos en un constante esperpento creando desasosiego a la ciudadanía de allí y a la de aquí, sino que siguen a un sector de la sociedad catalana absolutamente radicalizado. No son ellos quienes lideran sino muy al contrario, van como borreguitos detrás de quienes les marcan el camino, en especial las CUP, los DDR y ANV.

Por cierto que los ultimátum no sólo los da Torra, también se los dan a él y de ahí el que ANV le lanzó el pasado sábado. O marcas una hoja de ruta clara, contundente y lo que es más importante rápida o vamos a ir a por ti y tu gobierno le comunicaron públicamente.

Desde luego eso dicho a un personaje de su “personalidad” puede conseguir efectos terribles, especialmente a la vista de su reacción, muy parecida a la que en su día tuvo su mentor, ante los gritos de dimisión que le lanzaron y el comportamiento de su gobierno ante el asedio y posterior asalto del lugar donde reside la soberanía popular, el Parlament. No es de extrañar la sublevación posterior de los Mossos d’Escuadra que se sienten abandonados por sus superiores.

¿Todos los personajes de esta comedia bufa son iguales? ¿Todos están afectados por el virus que intenta reflejar Goya en su grabado? Algunos sí, en la otra orilla Arrimadas, Casado o Rivera caminan por la misma senda de pérdida de la razón y camino al desvarío, pero afortunadamente comienzan a aparecer otros que o nunca la han perdido como Iceta, Sánchez o Iglesias, o la han recuperado a tiempo como Junqueras.

Oriol Junqueras es un político formado y culto que no debería estar ya en la cárcel, especialmente porque alguien así resulta necesario en el sector independentista. Su reciente entrevista en la televisión pública española, realizada para escándalo de los sectores ultras unionistas y alabada por los progresistas, indica que otra política es posible desde esa orilla.

Gentes así son necesarias para Catalunya, pero también son útiles para España, especialmente en un momento tan complejo como éste. Leer esa entrevista con atención nos lleva a la conclusión que si alguien en el gobierno, especialmente su Presidente, tiene la lucidez suficiente de saberla interpretar no deberían dejar escapar esa ocasión, para buscar puntos de encuentro y soluciones a lo que ahora parece imposibles de resolver.

Junqueras tiene ascendente sobre un sector importante del independentismo, desde ERC a Omnium, que le escuchan y respetan y es alguien con quienes gentes como Iceta se pueden entender y acordar. Esta oportunidad abierta por esa entrevista se debe aprovechar sí o sí, porque quizás sea la última, al menos a corto plazo.

Leer esas reflexiones nos lleva a extraer de ellas propuestas sensatas y reflexivas. Quizás su mejor resumen sería que la “vía adecuada” para resolver la crisis catalana es la del “diálogo, el acuerdo y el pacto”. O que el “ruido y la gesticulación no sirve para nada”, al tiempo que ha reiterado la “obligación” de gobernar para todos.

Por último Junqueras ha rechazado cualquier expresión violenta y ha considerado un “error incomprensible” el creer que se puede conseguir algo con incidentes, con una clara descalificación a los CDR y la CUP.

Leer reflexiones de este calado nos saca de la sensación de melancolía actual, e indica que otra manera de hacer política es posible en Catalunya.

Se puede y se debe despertar de ese sueño de la razón que nos estaba produciendo monstruos y empezar a trabajar en la senda que marca Junqueras en su entrevista. Él junto a Iceta en Catalunya y con Pedro Sánchez desde España deben de aprovechar esta ocasión, fortalecer a las gentes sensatas y aislar a las radicales.

Para eso hace falta como ya se ha comentado en innumerables ocasiones, imaginación, buscando nuevas soluciones para viejos problemas, audacia en especial para sacarle de la cárcel y generosidad, dosis enormes de generosidad.

Éste es el momento, éste el lugar, Pedro Sánchez, su gobierno y el PSOE deben aprovechar esta oportunidad que les brinda Junqueras. Para eso necesitan alguien con autoridad que apoye a Iceta desde Madrid. Quizás en el gobierno figuras como Margarita Robles, bastante desaprovechada y encorsetada en su ministerio de defensa y con una gran sensibilidad en estos temas, o Ábalos, pueda colaborar. En el partido Odón Elorza que conoce la experiencia de resolución de conflictos en Euskadi, o el embajador en la UNESCO, Andrés Perelló.

Junqueras ha abierto una puerta a la ilusión, ha recuperado la razón, ha despertado ahuyentando a los monstruos. Ojalá desde la otra parte se ayude y colabore desde la sensatez.

Veremos……

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here