Andan las aguas revueltas en la cadena pública de Telemadrid. Después de unos años de franca decadencia, ahora parece que tras el impulso de Cristina Cifuentes a cierta independencia informativa, los madrileños han vuelto a conectar con el canal regional más allá de las muy visualizadas películas del Oeste. Sin embargo, hay cuestiones que hacen rechinar los dientes pues existe una polémica por la no convocatoria de elecciones sindicales desde 2011. Desde el PP y desde el Comité de Empresa se han enzarzado en una batalla por la necesaria convocatoria o no de la democracia empresarial. Los partidos de las izquierdas defienden al presidente del Comité, mientras que en las derechas sólo el PP parece defender la necesidad de la convocatoria (Vox si no puede blandir la bandera no habla; Ciudadanos hasta que no sepa si gana algo estará a la espera sin mojarse). Visto desde esta perspectiva lo normal sería situarse del lado de los sindicalistas y negar la mayor a la derecha madrileña. Pero ¿no tendrán razón en el PP?

En muchas ocasiones se ha dicho en estas páginas que, pese a que se requiera cierta simplificación para poder transmitir ciertos mensajes, las cosas nunca suelen ser negras o blancas sino que existen numerosos matices. Veamos los matices por tanto. Dicen los sindicalistas del Comité de Empresa (y así se lo han comprado los partidos de las izquierdas sin análisis alguno) que por culpa del infausto ERE no se pudieron convocar en su momento dado que habría demandas y demás litigios y actuaciones políticas. Eso ocurrió hace años, tantos como para que las imágenes de aquellos años se hayan nublado en las mentes de la mayoría. También dicen que al cambiar de una empresa a otra hay que esperar un tiempo. También aducen que habrá que ver qué pasa con las readmisiones si las hubiese. Y rematan diciendo que todo esto no es más que un ataque hacia el sindicalismo como mecanismo para acabar con la lucha sindical por parte de la derecha. Visto así hasta podrían dar pena. Eso es lo que intenta Luis Lombardo presidente del Comité de Empresa de Telemadrid y es algo que han comprado desde la izquierda (escuchen y vean la intervención del diputado socialdemócrata José Ángel Gómez Chamorro).

¿Qué dicen desde la derecha? Quien está llevando esta lucha adelante es Almudena Negro tanto en la Comisión asamblearia como desde los medios de comunicación. Especialmente mal ha sentado a Lombardo el artículo que publicó ayer la diputada donde ofrece una serie de datos (los que hemos resumido anteriormente) y un análisis de la situación. “De convocarse elecciones, al haberse reducido la plantilla, solo habría 13 o 17 delegados (dependiendo de si el número de plantilla supera o no los 500 empleados), con lo que más de la mitad tendrían que ponerse a trabajar” ha explicado Negro haciendo referencia a los casi 47 sindicalistas que hoy disfrutar de la delegación o la liberación. La diputada popular da en el clavo al señalar la pérdida de poder sindical en cuanto a liberados sindicales como elemento para no convocar las elecciones y no tanto la reversión del ERE, algo que no se producirá en la cantidad que dicen en las centrales sindicales.

La convocatoria de elecciones sindicales se produce mediante el preaviso de cualquiera de las secciones sindicales que tengan representación en el Comité de Empresa y puede darse durante el mandato de cuatro años o al finalizar éste. También se pueden convocar con las firmas de la mitad más uno de los trabajadores de la empresa. La legislación es clara al establecer que a los cuatro años de mandato hay que convocar elecciones y si se llevan ocho años pareciera que hay un fraude de ley por muchas excusas que pongan. Si desde el Comité de Empresa se afirma que están esperando a que se revierta el ERE se comete un fraude de ley porque a día de hoy son los trabajadores que son y hay que ajustarse a los hechos tal cuales son, no a factibilidades que igual no llegan a ser. Si la empresa tiene tan sólo 500 trabajadores desde hace años deberían convocar con la reducción que establece la legislación y, en caso de aumentar el número de trabajadores por la reversión, convocar de nuevo elecciones sindicales pues se lo permite la ley. Es más, el cambio de una empresa a otra también sería motivo de elecciones sindicales. ¿Tiene razón el PP al pedir que se convoquen elecciones? Sí, lo diga Agamenón o lo diga su porquero.

Estamos nuevamente ante unas acciones de las izquierdas que por mor de no se sabe bien qué acaban dañando la imagen de la lucha diaria. Defender a la “aristocracia obrera”, a pesar de incumplir la legislación, hace más daño a la izquierda que a la derecha. A quien, por cierto, se le dan argumentos para deslegitimar la lucha de clases que deberían llevar a cabo las centrales sindicales y que tienen tan abandonada en los últimos tiempos. Porque aquí no hay una lucha por una televisión pública de calidad y lo más neutral posible (o cuando menos plural y no teleaguirre), hay una lucha por privilegios aristocráticos (derechos son cuando se utilizan para la defensa de la clase trabajadora) y por tener más liberados sindicales que trabajen en el sindicato y no en la empresa (o empresas del sector que no tengan representación sindical). No es más que una separación de la realidad, por mucho que acudan a manifestaciones donde dejarse ver para aparentar, que propicia una desafección social respecto a una de las armas de lucha. No es que todos los sindicalistas estén entregados a la aristocracia (hay muchos y muchas que hacen una labor encomiable) pero es curioso este tipo de acciones (cuando además ganarían las elecciones) de protección de unos privilegios cuando hay personas que pasan hambre en Madrid.

Este tipo de comportamiento se observa cuando se abandonan los argumentos políticos y se pasa a la criminalización de las personas que denuncian los hechos. No hay contraargumento sino insulto personal, como el realizado por el presidente del Comité de Empresa. Si piensa que se derrotará a la derecha señalando, cual delator de régimen totalitario, es que se ha perdido el norte de lo que significa ser de izquierdas hace mucho tiempo. La diputada Negro y su pareja Jorge Vilches (un magnífico historiador de lo político, por cierto) han sido señalados por Lombardo sin exponer ni un solo argumento que justifique la no convocatoria de elecciones. Criminalización del adversario porque tiene razón y en Telemadrid se pasan la legislación por sálvese las partes. Cuatro años sin convocar elecciones sindicales porque se puede perder poder (esto es lo que hay detrás) en las peleas internas del sindicato no es el mejor argumento a defender. Los argumentos sobre el deseo del PP de politizar Telemadrid en su favor son legítimos y se pueden defender en la arena pública pero ¿qué tiene que ver convocar elecciones sindicales como dice la legislación si ganarían los sindicatos de izquierdas de calle para hablar de los deseos de un partido político? Nada que ver salvo cuestiones internas de sindicatos que a la clase trabajadora ni interesan, ni le gustan.

¿Pretende el PP cambiar la pluralidad de Telemadrid? Pues seguramente sí, como el PSOE tenía el control en Canal Sur y lo tiene en Canal Castilla-La Mancha. Con la salvedad de que en la Comunidad de Madrid hay que repartir entre tres partidos de la derecha y casi mejor les viene dejarlo como está no vaya a ser que acaben dando más presencia a Ciudadanos y Vox. ¿Qué partido político no desea que la televisión regional o estatal del lugar donde gobierna le sea favorable? Ninguno o ¿es que piensan que de gobernar la izquierda no intentarían sacar beneficio del control de los medios de comunicación? ¿Van a privatizar Telemadrid? Cuando lo intenten que se lance la lucha política y sindical. De ahí a no convocar elecciones sindicales que son en beneficio de las trabajadoras y trabajadores del ente regional hay un trecho. Si se respetan sus condiciones laborales y se logra un buen Convenio Colectivo al trabajador de turno le da igual PP que PSOE, lo que hay que defender son los derechos de los trabajadores y con salidas de tono o con la defensa de los “privilegios aristocráticos” a quien se hace daño es a la izquierda. ¡Como para dejar en manos de estas personas la lucha de clases!

1 Comentario

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here