El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha manifestado que un impuesto turístico sería «un parche» en el caso de la Comunitat Valenciana frente al problema de la financiación autonómica insuficiente. Puig ha participado en el panel de clausura oficial del IX Foro de Liderazgo Turístico Exceltur en Fitur, con el título “Resharping tourism: cómo crecer sosteniblemente y agilizar la transformación digital”.

Rápidamente, como contrarréplica al impuesto turístico que desea “imponer” Podem, Puig ha añadido que “lo que debe solucionar el problema de infrafinanciación de la Comunitat Valenciana es la financiación autonómica”. Siguiendo este hilo, el president ha querido demandar la necesidad de un nuevo modelo de financiación “que iguale a los ciudadanos”.

Por ello, se muestra contrario al impuesto turístico. Según el jefe del Consell, esa tasa “no ayuda a nada” en una comunidad como la valenciana con una oferta turística tan heterogénea, por lo que ha rechazado el establecimiento de esa medida, ya que, tal y como ha defendido, los impuestos deben ser “progresivos y útiles a la gobernanza global”.

El jefe del ejecutivo valenciano ha intervenido junto al presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, y la presidenta del Govern de les Illes Balears, Francina Armengol, además del presidente de Exceltur, José María González, la consejera delegada del grupo Riu, Carmen Riu, y el presidente de Balearia, Adolfo Utor.

En el debate, el president ha manifestado que “hay muchos ámbitos de colaboración y de cooperación interinstitucional que se pueden dar”, y ha añadido que “debe haber una cogestión público-privada”, como prevé hacer la futura Ley de Turismo, Ocio y Hospitalidad de la Comunitat Valenciana y que debería ser modelo en este tema. Por otra parte, Puig también ha mostrado la voluntad de la Generalitat de “sumar efectivos” mediante alianzas con ayuntamientos, policías locales y Administración estatal para fortalecer las inspecciones en los pisos irregulares.

En este sentido, Puig ha recordado que el año pasado se realizaron en la Comunitat cerca de 20.000 inspecciones de este tipo que permitieron que afloraran en torno a 12.000 pisos irregulares, y ha afirmado que “el alojamiento, sea en el ámbito que sea, debe ser legal, de calidad y de garantías para el cliente”.

Antes del acto, el president ha avanzado la propuesta, planteada de forma conjunta con Baleares, de promover un encuentro multilateral con las comunidades autónomas más turísticas de España durante el año 2018 en Palma. “Hemos decidido convocar una reunión para intentar establecer estrategias comunes de todas las comunidades que tienen un mayor peso turístico”, ha dicho Puig tras su encuentro con la presidenta de las Islas Baleares, Francina Armengol.

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