El expresidente de Murcia Pedro Antonio Sánchez (PP) registrará hoy miércoles en la Asamblea Regional su renuncia al escaño de diputado regional y después formalizará también su dimisión como presidente del PP murciano. Sánchez deja la política acorralado por los casos de corrupción.
El expresidente insiste en su inocencia, y reconoce que no se va por voluntad propia, sino por el cerco de su situación judicial, pendiente del procesamiento judicial por los casos Púnica y Auditorio, aunque se va acusando al PSOE de jugar sucio.
En declaraciones al diario La Verdad, Sánchez reconoce que las dos causas que tiene pendientes con la justicia terminarán en el Supremo, con lo que tendrá al menos dos años más de periplo judicial y le dejaría en una «situación insostenible». Por tanto, no llegaría a tiempo de ser el candidato en 2019, y «lo inteligente» -dice- es fortalecer al nuevo candidato, Fernando López Miras, actual presidente de Murcia tras la dimisión de Sánchez.
El expresidente admite que el momento de abandonar los cargos era la apertura de juicio oral, y el momento ha llegado.
Pedro Antonio Sánchez dice cerrar la carpeta pública y abre una carpeta privada, en la que se plantea irse por un tiempo a vivir fuera de España.
Esta mañana tiene previsto registrar su renuncia al escaño en la Asamblea y la dimisión como presidente regional del PP.
Será este viernes cuando Sánchez traslade esta decisión, «totalmente meditada», a la Junta Directiva del partido, máximo órgano entre congresos. En la reunión de dicho órgano se designará al actual jefe del Ejecutivo murciano, Fernando López Miras, como su sucesor en el partido y se barajará que sea el próximo candidato a las elecciones autonómicas de 2019.
