Debe estar enfermo o acuciado por el sobrevuelo de los fiscales sobre la causa que tiene pendiente sobre el caso Las Salinas, el caso es que el alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, ha dejado empantanadas unas obras con el grave perjuicio para los vecinos. Esto último es algo que ya ha demostrado que poco le importa, pero no tapar unos hoyos y dejar un poco apañadas aceras y vías es algo inusual. Bueno inusual en Amat que en cuanto ve un hueco sin tapar de ladrillo allí que va. Por ello, no por la extrañeza (aunque igual la tienen después de tantos años de lucha) sin por las consecuencias derivadas de la dejadez, se han acercado los concejales socialistas hasta el barrio de Torrequebrada.

Como recordarán, las obras tuvieron que pararse por afectar al Bien de Interés Cultural de Turaniana. Tras esto, la compañía constructora dejó todo sin tapar, sin arreglar, empantanado vamos. Manolo García, portavoz del PSOE, acompañado de otros concejales ha expresado que allí existen varios comercios cuyos propietarios así se lo han hecho llegar a los ediles socialistas quienes trasladarán, a su vez, este malestar el pleno municipal la próxima semana y esperan contar con el apoyo de todas las fuerzas políticas para defender los derechos de los vecinos y “el máximo respeto a nuestro patrimonio”. “Hemos hablado con personas con problemas de movilidad que tienen serios problemas para poder acceder a sus viviendas ya que la empresa abandonó las obras y no se ha hecho cargo de acondicionar la zona para que las personas puedan continuar con sus vidas”, ha afeado el portavoz socialista al Ayuntamiento, como promotor de los trabajos.

“El equipo de Gobierno del PP no ha mostrado ningún respeto con estas personas a las que ha abandonado entre zanjas abiertas, barro, casas y garajes a los que es difícil acceder”, ha descrito el concejal y portavoz del PSOE de Roquetas. La situación, ha dicho, “es complicada”. “El Ayuntamiento decidió iniciar con prisas las obras con el fin de tener una cinta que cortar de cara a la próxima campaña electoral”, ha reprochado Manolo García; y “tanta prisa se quisieron dar que no tuvieron en cuenta los preceptivos permisos que hay que tener para poder actuar en una zona BIC”, ha censurado y ha añadido que, además, “el Ayuntamiento sabía perfectamente desde el 6 de noviembre de 2017, fecha de la Resolución de Cultura que autorizaba las obras, que se tenían que cumplir todas las cautelas arqueológicas para poder remover las tierras junto a una zona protegida; pero lo pasaron por alto y ahora, su irresponsabilidad está perjudicando a los vecinos de Aguadulce y Roquetas”.

Así las cosas, la Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Cultura, “ha abierto expediente sancionador al Ayuntamiento por su mala actuación con el BIC de Turaniana  y, ahora, habrá que esperar a que se resuelva dicho expediente para depurar responsabilidades”, ha indicado Manolo García. Mientras tanto, ha reiterado, los socialistas se muestran partidarios de continuar los trabajos en la zona no incluida en el BIC “por el bien de los vecinos que no tienen la culpa del mal que ha ocasionado el equipo de Gobierno del PP, único responsable de la situación actual”, ha finalizado Manolo García.

Se espera que Amat, más cuando le impulsan desde la oposición, actúe con prontitud antes del estío y la época de mayor turismo en la zona y se lance, igual él mismo, a tapar agujeros y a echar cemento para solventar los problemas de la ciudadanía de Aguadulce. Total lleva poniendo ladrillos y cemento más de veinte años en la ciudad, así que seguro que tiene algún amigo o familiar que le haga el apaño. De esos mismos que investiga la fiscalía, por ejemplo, y así demuestra que no ha habido corrupción. Bueno, tampoco hay que exagerar.

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